Relajación voluntaria

Para iniciar un ejercicio de relajación voluntaria, primero elige un local o una habitación, preferiblemente el lugar previsto para ejecución de tus ejercicios de crecimiento personal, si ya los tienes en marcha. El sitio debe estar limpio; y tú, si prefiere, te habrás purificado por un baño previo.

Túmbate cómodamente y cierra los ojos..., respira tranquila y profundamente.. ¡Recuerda, nada debe molestarte durante los próximos quince minutos!.

Para comenzar tu trabajo interior, inhibe todo tipo de pensamientos y concéntrate en tu respiración. Cuando surja algún tipo de pensamiento peregrino no le prestes atención, simplemente déjalo ir y vuelve a concentrarte en tu propia respiración…. Se consciente de los momentos en que alternativamente expiras e inspiras, nota la diferencia, siente la temperatura del aire que entra y sale de tu cuerpo… Mantente al menos tres minutos en ese estado de tranquilidad absoluta, calma, serenidad... Sumerge todo tu ser en el mundo del vacío interior…, sentirás que tu respiración y corazón quedarán en armonía.

Ahora, empieza a relajar conscientemente tu cuerpo… En cada ciclo de respiración proyecta mentalmente tu pensamiento hacia una parte de tu cuerpo de la cuál relajarás los músculos en su parte física, y no sólo con la mente. Puedes comenzar en sentido desde los pies hacia la cabeza… Relaja tus pies..., cuando sientas que lo has logrado pasa a relajar tus pantorrillas… Siempre al ritmo de tu respiración.. Luego tus muslos, caderas, vientre.., y así sucesivamente hasta la parte frontal de tu cabeza. Puedes continuar en el siguiente orden: pecho, espalda, manos, antebrazos, bíceps, hombros, cuello, mandíbula, párpados, parte posterior de la cabeza, parte superior de la cabeza, frente y tercer ojo, entre las cejas. Al llegar a este punto toma también conciencia de los músculos de tu cara los cuales deben estar llenos de serenidad, al igual que tu mente llena de calma y sosiego. 

Mantente un momento en este estado, y luego concéntrate de nuevo en tu respiración, abre los ojos, estírate y vuelve a tu vigilia natural.

Este estado de relajación será necesario alcanzarlo frecuentemente, para todas las prácticas que requieran trabajo a nivel subconsciente. Principalmente para estimular los pensamientos que inciden en la formación de costumbres y hábitos positivos, así como para ejercicios de desprogramación mental para eliminar emociones negativas, temores, dudas y todas esas ideas inculcadas en nuestra conciencia por la masiva penetración de palabras e imágenes sugeridas por las personas, hechos e información de nuestro entorno. Así forjaremos nuestro carácter y circunstancias, y consecuentemente el destino que queremos.

Cómo ves, no es nada difícil, podemos hacerlo nosotros mismos ¡Fácil y Gratis!. 

Avanza día a día, en tu propósito de ser grandes personas; en la verdad, la fuerza, la sabiduría y el amor Universal.

Si te gustó el Artículo, Siguenos en el Blog, y recibe todas las Publicaciones.

Arriba a la derecha; Haz Clic en Seguir..!